WP

Bueno, después de la experiencia WordPress debo decir que vuelvo a Blogger más contenta, la verdad me parece más personalizable y de fácil acceso, transcribí los últimos posts y sus respectivos comentarios... 
No sé... fíjense qué les parece...


Para hoy no tengo nada emocionante que contar así que entreténganse con 9gag, youtube o alguna de esas páginas que tanto les gusta mirar, ya demasiado laburo tuve mudando el blog de vuelta.


¡Ahí se ven!

El fin de semana más loser de la historia (18-06-2012)

Les voy a contar la historia de uno de los fines de semana más losers de la historia, de la historia de Lu, claro. Aclaro que esto pasó hace tiempo, con gente con la que eventualmente me dejé de hablar, por lo que reservaré nombres para otra ocasión.
Todo comienza el viernes a la noche, cuando aburrida y cansada por la rutina de la semana, me dispongo a pasarla tranqui en mi casa, hueveando en la computadora, molestando a diversos nerds gamers interrumpiendo sus juegos y a algún que otro ente de los comúnmente llamados “normales”… tenía todo listo, mi copita de ron, mi netbook enfrente y muy pocas ganas de ver la calle, menos aún con el ofri que hacía.
En medio de mi actividad internetera, se comunica un conocido para comentarme que salía a tomar algo por ahí con una amiga y mi genio fue mucho más fuerte (convengamos que una salidita de último momento no se le niega a nadie (?)) que mi paja, por lo que decidí sumarme.
El tema no fue salir, me di cuenta de que sí tenía ganas, pero había cosas en contra, empezando por el frío, siguiendo por el cansancio y terminando con la falta de dinero.
Pues bien, llega este fulano a buscarme y fuimos a tomar algo por ahí como estaba previsto… recuerden que yo ya tenía una copita de ron encima, o dos, o tres, no sé.
Seguimos tomando, y no agua precisamente. Empezamos a escrutar a los presentes y fue muy triste darnos cuenta de que el único que zafaba era el patova… y hasta ahí nomás.
Con el correr de las medias horas y las medias copas, se fueron embelleciendo paulatinamente los muchachos que jugaban al pool de manera distraída sin saber que estas dos diosas (?) se fijaban en todos y cada uno de ellos a punto de confeccionar una ficha técnica detallando absolutamente todo lo que estaba a la vista, o lo que ellas veían, que tranquilamente podría haber diferido una barbaridad.
Había más de uno que se había vuelto misteriosamente dable, así que entre las líneas de diálogo de la reunión de amigos (sí, también nos pusimos al corriente de unas cuantas cosas ya que hacía un tiempo que no nos veíamos) mechábamos comentarios sobre los sujetos en cuestión.
La muchacha que estaba con nosotros, en determinado momento (cabe destacar, después de dos botellas de vino) me señaló un muchacho que le pareció atractivo y dirigí mi mirada hacia él, en un ensayo de mis aptitudes de sexyness exhuberante de antaño. Después de unos minutos el susodicho se da cuenta de mi jueguito seductor y me devuelve la mirada… este hecho me hizo pensar que claramente había captado el mensaje y no faltaría nada para que se acerque a nosotras. Error.
Aparentemente había perdido mis dotes de seducción (?), o tal vez se debía al hecho de que parecía que me había vestido para ir a jugar al fútbol con los pibes más que para ir a tomar algo a un bar y pretender levantarme algún que otro flaco.
Llevaba una calza recta color gris, zapatillas, una remera de los Red Hot y cero maquillaje. Esto, teniendo en cuenta lo arruinada que estaba, mis ojeras y mi probablemente revuelto cabello, deduje días más tarde que era muy factible que hubiera sido la causa del desfavorable resultado de mi táctica.
Mi amigo dijo “Chicas, ¿vamos?”. Obedecimos. Yo por lo menos, suelo obedecer cuando estoy pasada de copas, lo cual podría resultar peligroso, pero hasta ahora siempre me salió bien, por suerte tal vez, no sé.
Nos empilchamos para salir al frío del crudo invierno que azotaba la calle y caminando lentamente le dirigí una mirada al susodicho con el que había desarrollado el jueguito, esta vez muy de cerca. Instantáneamente se hizo ver lo muy mal que me había ido: “Pasá nomás” escuché.
Indignada, derrotada, sintiéndome totalmente apabullada, pero no dándolo a conocer, sólo atiné a dirigir una mirada de “Jodete, vos te lo perdés” y salir con aire triunfante del lugar. Nada podría deshacer esa inevitablemente devastadora derrota (?). O sí. Fuimos directo a bajonearnos una hamburguesa recalentada en un quiosco de mala muerte y todas mis penas habían desaparecido para entonces.
Volví a mi casa, revoleé las cosas y me tiré en la cama como estaba, al otro día la resaca no me dejó vivir hasta varias horas después de haber despertado.
Esa noche volví a salir. Más tranquila, sin ánimos de levantarme a nadie, salía con un amigo, íbamos a charlar, comer, mirar una película, ponernos al corriente (también hacía bastante que no lo veía). Nos encontramos, cenamos, fuimos al cine. El fulano hablaba. Mucho. Durante toda la película metió bocadillos hasta que le dirigí una mirada de “Ok, lo charlamos después”, aparentemente fue muy fulminante porque me pidió disculpas. Soy mala.
Salimos del cine, yo, claramente emocionada por la película, o porque el muchacho ya no la iba a interrumpir, no sé.
Nos dispusimos a caminar, sin saber a dónde íbamos, pero supuse que él ya quería irse. Contrariando mis actitudes de siempre inquirí “¿A dónde estamos yendo?”, y me contestó “Vos decidís”, “Bueno, vamos a tomar algo”. Realmente quería charlar. Me dijo “Hasta las 0200 tengo tiempo”… WTF?!?!?! pero no terminaba ahí, siguió “La muchachada me espera en un boliche”… WTF x3
Osea que ahora estaba siendo utilizada de pierna para hacer tiempo hasta que se hiciera la hora de caer al bailongo. Jodió. Nos sentamos a charlar. Charlamos. No habíamos terminado de charlar y me dice “¿Te molesta si vamos yendo?”. Yo claramente dije “Te vas a la mierda vos y tu puto boliche”, o tal vez “Ok”, no sé.
Lo que sé es que estaba, a las 0300 en la parada del colectivo rumbo a mi casa. La charla que llevábamos claramente se cortó y terminamos hablando de boludeces. Me tomé el 10. Llegué a mi casa, me puse a leer y a la media hora estaba dormida.
El domingo todavía me duraba la resaca.
Loser lvl: over 9000.
PD: la hora militar es más cómoda para escribirla.

A la mañana todo puede pasar (13-06-2012)

Situación en la parada del bondi esta mañana:
Una madre de temer (de los barrios bajos de mi bella Avellaneda City) con tres criaturas espera el mismo bondi que yo, me miran, los miro, me vuelven a mirar, los vuelvo a mirar, pero esta vez me hago la pelotuda a ver si me embocan. Cabe destacar que para laburar no me visto con hilos de oro, pero sí lo más decentemente posible, suelo llevar lentes de sol y zapatillas negras lustradas, esto hace que, en un barrio habitado por gente cuyo estilo se asemeja increíblemente a esto, me miren raro.
A la vuelta de varios jardines de infantes y algunas escuelas es normal y esperable ver niños, pero estos iban para otro lado, para capital, lo cual me lleva a preguntarme ¿por qué carajo tienen que tomar bondi teniendo tantos colegios cerca? capaz no había vacante, pero no dejará de constituir un misterio para mi.
En los 5 minutos que tardó en venir el 10 los vi hacer unas cuantas cosas. Entre los cuatro ocupaban todo el asiento del refugio de la parada, dos varones de alrededor de 7 u 8 años y una nena de unos 5 o 6 a upa de la madre.
Los varones empiezan a pelearse, típico de criaturas, a lo que la madre los reta. Pero ellos claramente no le hacen caso, y ella ni se molesta en volver a llamarles la atención. La nena cuasi extasiada miraba sin parpadear el poste de luz de la vereda de enfrente.
Eran una película, me sentía en el cine, me lo hubiera creído de no ser por la cagada de paloma que en ese momento cayó a 2cm de mi pie derecho (zafé de pedo).
En eso veo el bondi que se asoma en la lejanía de la calle. Y acá viene lo interesante:
Cuando vuelvo a mirar al grupo, la madre estaba escrutando el interior del oído del varón más grande y acto seguido, procedió a sacar la (supongo yo que eso era) cera con su dedo meñique, a sus anchas, no olviden dónde estamos. Repite la operación. Y una tercera vez. Todas las veces se limpia el dedo en el pantalón del nene. Pero esto no termina acá.
La nena, saliendo de su estupor, se levanta del regazo de su madre y comienza a limpiar con su mano el pantalón del nene. Aparentemente la madre había dejado tanta cera de oído pegada en el bendito pantalón que la nena sintió la necesidad de “arreglar” dicha situación.
Me dispuse a parar el colectivo y dejarlos subir primero pensando “kill them, kill them with fire!”. Por lo menos tenía el consuelo de haber cargado música en el mp3 la noche anterior y poder escuchar algo de Red Hot tranquila y así olvidar el pasado suceso.
En ese momento compruebo con horror lo más temido y menos esperado: me había olvidado los auriculares.
Claramente estoy shockeada por la experiencia y es por eso que no pude evitar que uds se enteraran de tan gross visión que capturó toda mi atención por un lapso de unos 2 o 3 minutos, todo un logro.
Ahí se ven.

Indignación Ferretera (12-06-2012)

Querida Cris:
Cuando asumiste, un aro de nariz de los más chotos, salía $2, hoy fui a comprar uno nuevo después de que, en una etapa normal de “El ciclo del aro de la nariz”, se me perdiera el que tenía, y me lo cobraron $12, el mismo cacho de lata de mierda, de medio cm de longitud y un strass del tamaño de la cabeza de un alfiler me salió DOCE PESOS, me sentí garchada por un panserbj0rne a la carrera en una noche de tormenta en los suburbios de Sbalvard, y ni un besito me dio (?)… realmente esto se fue al carajo…
¡La gente perforada también tiene derechos!
Firma, una agujereada argentina con el corazón destrozado y sin un gramo de esperanza a la que ya ni un “Eifersucht” de Rammstein puede consolar :’(

De la Importancia de los Smileys (emoticones) [12-06-2012]

En esta nueva entrega, inspirada por The Oatmeal, les quiero comentar, mediante significativos ejemplos, lo MUCHO que importan estos pequeñísimos y tan poco valorados (?) símbolos.
Los clasificaré para destacar aún más su importancia y el tipo de situaciones en los que hacen una diferencia, en detalle:
“:)” (carita feliz): la situación más común es para ocultar sarcasmo, aunque algunas veces puede significar verdadera alegría o buena intención.


“El te que me preparaste estaba RIQUÍSIMO  ” (en realidad era un asco, le faltaba azúcar y le pusiste demasiado limón, me costó un huevo y medio tomarlo, pero como no tengo las pelotas para decirte la verdad en la cara, te acerco una frase convencional y le agrego un smiley que te hará creer que en realidad me gustó, cuando lo que estoy diciéndote es claramente sarcástico)
“:D” (carita MUY feliz): la he visto utilizada para denotar los sarcasmos, lo más común es usarla para hacer notar el orgullo por algo.


“Y así es como siempre nos terminan cagando en el laburo  ” (primer uso descripto)
“Sí, fui a ver a los Red Hot, me cagaron a piñas y no podía respirar de lo que saltaban, pero LA PASÉ GENIAL  ” (estoy orgullosa de algo, fue una mierda, casi me ahogo, me cansé, me dolió todo el cuerpo por una semana, pero aún así estoy francamente orgullosa de ello)
“(?)” ———> de uso demasiado frecuente en estos días, expresa que todo aquello que lo antecede fue dicho en joda. Mucha gente no lo entiende y se toma la proposición antes mencionada enserio, de ahí surgen discusiones, que el autor de la frase que incluye el “(?)” disfrutará de seguir.


“¿Quién se copa y me consigue una cita con Jeffrey Donovan? (?)” Claramente no estoy hablando enserio… aunque algún idiota podría tomarlo seriamente y argumentar que estoy hablando pelotudeces, a lo cual contestaría afirmativamente.
“Ayer en el diario salió una noticia, no sé si la leíste, sobre un revuelo de negros en Calamuchita. Encima pueden votar (?)” (suponiendo que el primer hecho fuese real) Acá estoy aludiendo al racismo expresado por una frase que indica disconformidad con el hecho de que la gente de piel oscura pueda votar. Algún infradotado podrá tomarlo enserio y empezar a discutir, con lo cual tomaré mi camaleónica posición nazi y seguiré discutiendo hasta que pierda la gracia, momento en el cual comenzaré a ignorar a mi interlocutor.
“xD” o “>.<”: es una expresión que indica algo por las líneas de “lo que acabo de decir me causa gracia hasta a mi”, alude a esta imagen, aunque tiene muchas interpretaciones dependiendo del punto de vista del emisor y el receptor del mensaje que contenga el símbolo.


“Esta mañana fui al baño y en el camino me tropecé con un hueso de hormiga y me fui de boca al piso xD” no hay mucha explicación que darle: SOY UNA PELOTUDA y eso es gracioso, punto.

“U__U”: este símbolo indica desdén, superioridad o un simple “no tenés razón”.


“No me interesa, realmente creo que nada me la puede chupar más que lo que me estás diciendo, u_u”
“Claro, como siempre, una vez más, estoy en lo cierto, la mayonesa se hace batiendo huevo con aceite, u_u”
“Te dije que no era como vos pensabas, la acidez estomacal se combate con sal de frutas, no con buena alimentación, u_u”

“O__O”: la sopresa extrema, simula dos ojos abiertos como huevos fritos, sustituye la clásica frase “con los ojos como el 2 de oro”, usualmente lo podríamos colocar ante brutalidades de la vida como el siguiente spoiler:


“WTF O__O ¿me estás cargando? ¿entendés que mi vida no va a tener sentido ahora que sé que Anakin es Darth Vader?”

Claro que los casos son incontables y no podría meterlos tooooooooodos en un solo post, estos son los que más uso yo, digamos que también intento que se entienda un poco mi lenguaje particular “internetero”…
Hasta la vista, babies. 

TrolleArte

Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa ¿cómo les va? ¡¡No se escucha!! ¿cómo les va? ¡¿¡¿cómo?!?!  ¡¡¡que cómo les va!!!


No, no me volví <más> loca, simplemente ejercito los dedos para que no se me congelen con este frío de MIERDA, Loco, todos putos, 2 grados en mi barrio, esperen que voy al solarium, me meto vestida y vuelvo. Estuve pensando mucho en este día sin postear y me gustaría acercarles, queridos nulos lectores(?), un "instructivo" para hacer reventar a otras personas. Porque TODOS hemos querido hacer algo así alguna vez. Probablemente más de uno sepa a la perfección cómo lograr esto. Otros no tanto. Los que puedan "dar cátedra" sobre el asunto, invitadísimos están a dejar sus sugerencias en la sección de comentarios más abajo.


Una vez me dijeron "si vos estás bien, el que no te quiere revienta". He aquí la primera máxima para hacer reventar a quien no te quiere. La persona que desde que te conoció amasa un odio incomparable causante de los más profundos deseos de tomarte con su mano derecha de los pelos y con la izquierda de las botamangas y tirarte en caída libre desde el 6to piso para que acto seguido te hagas tortilla de empleado contra el asfalto de una poblada calle céntrica (me fui al carajo con la longitud de la oración) es la primera a la que le vas a ver salir vapor de los oídos cuando te pregunte, por normas de etiqueta(?), "¿cómo estás?" y vos le contestes, con la mayor de las frescuras "como diría Moria, MEJOR ME PERJUDICA". En otras palabras, que vos estés bien es lo peor que le puede pasar a tu "enemigo".


Acá también podemos diferenciar personajes, como en el colectivo: si queremos hacer reventar a un hablador, por ejemplo, no hay nada más efectivo que no escucharlo o en su defecto, no prestarle atención; ni hablemos de no contestarle, o hacerle notar, deliberadamente, que no te interesa lo que dice o no le seguís la corriente, no lo entendés. Esto provocará reacciones como 
"¿me estás escuchando, che?",
"¿qué?", 
"te decía que la piba esta, la que me encontré el otro día en Burguer Donald (R), está más buena que mandarse una bolsa de palitos de la selva ya desenvueltos", 
"ah, sí sí, igual no la conozco", 
"pero te dije que labura acá, en la oficina de al lado", 
"pero no la ubico"
...y podríamos seguir así toda la mañana.


Otra rama de personalidades particulares que es fácilmente "molestable" son los rockers/metaleros/pesados... esos que odian cualquier tipo de música que no sea lo que ellos escuchan. Poné Black Sabbath, Led Zeppelin, Deep Purple, Iron Maiden, Tarot, Sonata Arctica, (y lo dejo en "etc" porque sino me ocupo medio post con la lista de bandas), etc. y no sólo que va a estar todo bien, sino que hasta capaz te hablan y llegás a caerles bien; ahora, digamos que alguno de estos te cae mal o simplemente te levantaste cruzad@ y tenés ganas de hacerlo reventar. Fácil, cualquier pachanguero (y si no sos pachanguero, lo tenés para estos casos) tiene en su reproductor de mp3 o aparato-para-escuchar-música-potátil-random algún tema movido, de esos que no te dejan quedarte quieto, léase una cumbiancha, reggaetón, cuarteto, merengue, salsa, (ídem al paréntesis anterior, salvo que esta vez cambio "bandas" por "ritmos"), etc. Con un solo tema que pongas a un volumen audible bastará para que dicho personaje te putee por alrededor de una hora. Mi amigo Johnnie, por ej. representaría uno de estos, claramente irritable ante cualquier tipo de música que incite a "mover el esqueleto", y ante pantalones caídos.*


Otro personaje que se puede molestar en caso de así quererlo es el callado. El tipo que no lo escuchás articular palabra en todo el día. Que llega a la oficina, se sienta, hace su laburo, come, sigue haciendo su laburo, se levanta y se va, así por 9hs diarias de lunes a viernes, o en el horario que sea. La clásica es hacerle chistes que usualmente no entiende, o está tan encapsulado en su mundo que no te va a dar bola y cuando se de cuenta de que le estás hablando a él, ya todos se estarán riendo. Una buena es imitarlo, el callado suele tener particularidades como ticks o movimientos "acostumbrados", como rascarse la cabeza con la mano al revés, como Curly de Los Tres Chiflados, mover la pierna incansablemente como si le hubieran choreado la máquina de coser, o tartamudear. Generalmente todos contamos con un buen imitador, que se ganaría la vida muy fácilmente sobre diversos escenarios, pero en cambio, lo tenemos en la oficina con nosotros, atendiendo reclamos de clientes, gerencia, etc. En este caso, el imitador nos alivianará el trabajo, en caso de que nosotros no seamos esa persona.


En internet el acto de "hacer enojar" se conoce más comúnmente con el nombre de "trollear", que viene del Troll o Trollface, y aquí transcribo definición de una gran celebridad sobre el tema: <<Trollear es una forma de comunicación que solo busca irritar/enojar, pudiendo decir cualquier cosa con tal de lograrlo. El ejemplo mas básico sería entrar a un foro de Boca y crear un thread llamado “Hace 10 años que no ganan nada: pruebas adentro”.>> <--- para leer más genialidades de esta persona, pueden acercarse a http://www.lainternetapesta.com.ar, aunque a más de uno ya le quemé el cerebro con esa página y su serie. Paso a detallar algunos ejemplos más. Suelo entrar en una página de feisbuc que está dedicada a quejarse, específicamente puesta ahí para que la gente exprese opiniones y sentimientos que les provoquen malestar, incomodidad u otras cosas negativas. Es muy común entrar cada tanto y ver algún fagget tirando mierda, confundiendo los tantos. Me divierte mucho hacer enojar a estos susodichos simplemente mostrándoles que lo que dicen no tiene sentido "sos una conchuda", "lógico, soy conchuda porque tengo concha, sino sería pelotuda, o boluda"; con este tipo de frases desencadenás respuestas de varias líneas que generalmente te resultarán muy graciosas. Infinitos son los ejemplos en este campo, ya que la internet da para cualquier cosa.


En cualquier caso, recuerden, estar bien es lo peor que le pueden hacer saber a alguien que quieren que la pase mal. A menos que sea alguien a quien le caigan bien, en ese caso péguenle con algo que saben que les duele, como solemos hacerle a mi amiga Natty con su estatura.


*Nota de la autora: igual te queremos Johnnie (?)

En el Bondi NO

Probablemente muchos de los pocos que leen esto se hayan cruzado con uno o más (o todos) de los personajes que a continuación detallaré.


No es que yo misma no encaje en algunas o todas las descripciones, incluso más de uno también se sentirá identificado y no precisamente por habérselos cruzado nada más.


Espero que entiendan que esto es MI opinión basada en MI experiencia, se aceptan sugerencias de nuevos personajes.


A saber, en el bondi, todos los días, te cruzás con gente indeseable, que indudablemente encajará en alguno de estos patrones:


La topadora: cuando el bondi está hasta la manija, y el señor o la señora, piensa que en el fondo está el lugar ideal para pasar el resto de su viaje, por lo que, a pesar de que no haya lugar disponible para que su humanidad pueda llegar cómodamente a dicho punto del colectivo, comienza a empujar sin miramientos a todo aquel desgraciado que tenga la mala idea de estar ubicado en su camino, generalmente al grito de "¡¡¡¡PERMISO!!!!"... más de uno de ustedes seguramente todavía tenga algún hematoma ocasionado por el golpe contra el caño que está al lado de la expendedora de boletos, claro, precedido por el famoso y vacío "ay, perdón", que la topadora suelta cuando se da cuenta de que está provocando contusiones a sus co-pasajeros.


El amague: por lo general viejas de mierda que disfrutan, en bondis tan cargados de gente que ya no paran más hasta descomprimir un poco la carga, de simular su próximo descenso. Cambian de posición, agarran los bártulos que tengan y los cambian de lugar, se acomodan la cartera, miran por la ventanilla dando a entender que están llegando a destino. Todo para después hacer un gran "OLE" y quedarse sentadas sin más después de que quien está parado a su lado -por lo general, yo- se haya hecho LAS ilusiones y proceda a putearla mentalmente en todos los idiomas que no sabe hablar.


El cataléptico: clásico personaje, siempre a hallarse entre la gente ubicada en asientos, que, al subir algún lisiado, embarazada, viejo choto o cualquier beneficiario del derecho a ocupar uno de los primeros tres asientos del vehículo, cae instantáneamente en un sueño profundo que ni el más violento choque podría interrumpir. Increíble lo que pueden provocar ciertas enfermedades.


El mirón: este puede estar sentado o parado, si está sentado, es por lo general alguien que se encuentra debatiéndose entre la existencia o no de embarazo en aquella muchacha excedida de peso que acaba de sacar el boleto, pensando "¿le doy el asiento o le doy un activia?". Fija su vista en el vientre de la susodicha haciéndola sentir incómoda, sin cederle el asiento, hasta que eventualmente ella se lo pida o alguien más se lo de. También sucede que, cuando está parado, mira, como en una vieja publicidad televisiva, a una persona X imaginando mentalmente la frase "mirame, mirame, mirame, (coma periódico)"; cuando persona X finalmente lo mira, desvía la mirada hacia la ventanilla donde, casualmente se encuentra el cartel de un cine condicionado, provocando que X ría internamente considerándolo de manera automática un pelotudo.


El de los anteojos de sol: este personaje puede ser encontrado en versión femenina o masculina. Usualmente se lo ve mirando hacia la ventanilla, al parecer, sin mayores preocupaciones. Pero en realidad, lo que sucede detrás de ese par de lentes oscuros es una crítica inminente de absolutamente TODOS los demás pasajeros. "Qué buen@ que está es@", "qué horrible cartera tiene aquella" o "dejá de tirarte pedos" son algunas de las frases que cruzan por su mente durante el viaje; lo que nos lleva al siguiente personaje.


El tirapedos: típico hijo de puta que se caga en el bondi, más comúnmente en un bondi lleno, bajo la premisa de "nunca van a saber que fui yo", a veces lo acompaña con una pequeña sonrisa, que algún que otro personaje será capaz de detectar, si presta la suficiente atención y, porsupuesto, lo engancha justo.


El colgado: el que nunca sabe a dónde va, cómo llegar, si se subió al bondi correcto, no tiene la dirección, no sabe en dónde tomó el colectivo y claramente no tiene ni idea de qué está haciendo ahí. Pregunta constantemente al chofer cuándo se tiene que bajar, si falta mucho, usualmente cuenta con un dato acotado, como ser el nombre de la calle en la que debe descender, pero nada más, lo que confunde y hace enojar a dicho conductor, provocando gritos y peleas, que nuestro siguiente personaje disfruta a sus anchas.


El espectador: el que está a la expectativa de cosas "emocionantes"; cuando se produce alguna discusión, choca el colectivo de al lado, se cae alguna vieja,  o alguien no recibe el vuelto de la expendedora, este curioso personaje se encuentra con la vista fija en el hecho, anotando todo mentalmente para postearlo en feisbuc cuando llegue a la casa, o, si cuenta con un dispositivo que se lo permita, lo posteará inmediatamente, lo que nos conduce a la siguiente descripción...


El cell fan: el moncho que JAMÁS se desprende del celular desde que puso un pie en el bondi hasta que bajó, a este patrón lo podemos sub-dividir en algunos otros, a saber:
  El hablador: no para de hablar por teléfono, más molesto aún, por radio, medio destinado a conversaciones empresariales (?): -prip- "¿ah sí? no sabés boludo, esta mina está que se parte sola" -prip- "no te la pue" -prip- "encima fuimos a la barra y conocía al barman" -prip- "no me digas que chupaste grat¡'" -prip- "obvio papá, estás hablando con un groso";
  El mensajero: se sube ya mensajeando, obtiene asiento en un colectivo medianamente lleno, y continúa mensajeando durante toda su estadía en el mismo. Usualmente este tipo de gente cuenta con un ringtone particularmente molesto y a un volumen de temer.
  El music-maniac: porta los auriculares más grandes y feos que puedan encontrarse en el mercado, a veces incluso con colores fluorescentes que lo hacen aún más llamativo de lo que ya de por sí es. Mueve irremediablemente la cabeza, las manos y los pies al ritmo de la música que está escuchando, lo que lo hace parecer, obviamente, un infradotado ya que NADIE más está escuchando esa música. Punto a favor de este personaje: es feliz en su cápsula musical y le chupa un huevo el resto del bondi -o del mundo-.


Y cerramos con un clásico que no falta en casi ningún bondi:


El grupo de locas gritonas: las tres o cuatro pendejas de mierda, a veces con uniformes, otras a las 0600am cuando salen de bailar, que no pueden parar de gritar, usualmente comentando obscenidades de sus vidas personales, lo mucho que tienen que estudiar y lo poco que van a cumplir con tal premisa, lo mucho que odian a sus castradores padres, o lo puta que es esta o aquella otra, que seguro no les hizo nada, pero a alguien hay que sacarle el cuero ¿no?. Por lo general, provocan las miradas del resto de los pasajeros, hacia ellas y entre sí y un pensamiento general que abarca varias frases que van desde "por favor que se callen" a "por favor que se bajen".


Saludos, lectores, espero que lo hallen verídico, y recuerden... todos nos cruzamos con alguno de estos alguna vez, todos encajamos en alguna de estas descripciones alguna vez... tratemos de hacer algo bueno por la humanidad (?) y recordemos que todo esto son cosas que se hacen en casa.
¡¡En el bondi NO!!

Hola, ¿qué tal?

Esto pensarías si estuvieras pasando por una fiestonga de esas con mucho alcohol y drogas dando vueltas, de las que se supone que tienen que ser "clandestinas" pero que cuando te quisiste dar cuenta todo el mundo sabe de ellas y hay cincuenta monchos de más que nadie invitó. Esto vas a pensar cada vez que entres acá. Porque lo más probable es que nada tenga que ver con nada y que cada vez que vengas te termines dando cuenta de que no sabés ni para qué mierda viniste, pero igual te quedaste "a ver qué onda". Y probablemente los efectos se asemejen a los de grandes cantidades de alcohol y música fuerte. O no.


Esa es la idea de esta página/blog/comotegustellamarle. "Vi Luz y Entré" me gustaría mostrar al mundo situaciones varias de la vida (propia o ajena, con o sin permiso... están avisados), hilarantes o no. Recibir opiniones y críticas, puteadas también, supongo que siempre ayudan (?).


Queremos (mi conciencia y yo) empezar a formar un vínculo sólido con una audiencia cuasi nula, pero con mucha presencia. Un vínculo que también se dará entre la autora y los posts y los lectores... esto se va a terminar convirtiendo en un gran quilombo. ¿Seré vidente? ¿Bidente? bueno, por lo menos tres dientes tengo, así que de la última zafo.


Para empezar les acerco la historia de mi más reciente aventura (léase desventura en realidad) por las calles de la city porteña con una misión: dar de alta la obra social. Como muchos creerán, una misión pseudo-imposible, pero que finalmente pude concretar.







Como todos saben, las dependencias públicas cuentan con un sistema bastante choto de recepción y trato de las personas que requieren de sus "servicios".




En esta oportunidad, dada mi reciente contratación, me dirigí a OSECAC(a) a solicitar el alta de la cobertura, contaba con el formulario que entrega la empresa ((quienes hayan trabajado lo conocerán)) y mi primer recibo de sueldo.




LLego y en la misma cola escucho a un representante de la nunca bien ponderada obra social gritándole a una persona que tenía que llevar "todas las copias que detalla el formulario en la parte de adelante" ((todo lo que te dice acá, ¿ves?)), viendo la cara de asustada de la persona en cuestión decidí alejarme silenciosamente del lugar para recopilar la documentación que me faltaba.




En mi segundo intento, unos días después, con todos mis papeles, me acerco a la dependencia y una señora me atiende cuasi amablemente. Me informa, después de los 20 minutos que le tomó ir de un escritorio a otro ((era medio renga)), que tenía que dirigirme a la Superintendencia de Servicios de Salud a realizar una corrección en el padrón dado que la última OS donde hice aportes no era OSECAC(a).




Lu: -"pero ¿me van a pedir algo más?"
Rep: -"No, sólo el recibo"




Economizando el tiempo, me fui directo a la superintendencia a realizar dicha corrección.




Me dieron un número y esperé pacientemente hasta que me atendieron ((unos 40 minutos, momento para el cual ya había gastado la mitad de la batería del celular)).Cuando titila mi número en la pantallita, me dirijo al escritorio correspondiente para encontrarme frente a una muchacha que me responde un amablísimo "certificado laboral y copia del documento", ante mi "Hola, buenos días, vengo a hacer una corrección en el padrón".




Lu: -"tengo el recibo"
Rep: -"no, tenés que traer certificado laboral, tiene que seguir este modelo"
Lu: ((viendo que era inútil discutir)) -"ok, gracias"




Volví frustradísima, a sabiendas de que de ahora en más tendría que usar mis horas de almuerzo para realizar los trámites, porque... ¿cómo podría volver a pedir permiso para salir a hacer EL MISMO trámite tantas veces? Hay gente a la que explicarle no sirve.




Pedí el certificado laboral al llegar a mi puesto de trabajo nuevamente. La muchacha de rrhh me lo preparó y recién 2 días más tarde pude realizar el trámite de corrección de padrón. 




Ahora me espera OSECAC(a) que seguro me va a pedir el documento de mi tío abuelo en original y copia, el pasaporte actualizado de Fidel Castro, y un certificado de mi vecina avalando el hecho de que soy una afiliada responsable y no me hago atropellar a propósito para sacarles plata a las obras sociales...




Obviamente, tengo todo :D